

La estética inconformista del punk encontró en Sid Vicious (Londres, 1957; Nueva York, 1979) a uno de sus mejores embajadores. Dentro de su uniforme, el negro –en cazadoras de cuero, vaqueros ultrapitillo o aquel mítico traje con el que acudiría una y otra vez a los juzgados– fue la única norma de un estilo antinormativo. «¿Pero qué hubiera sido de él, y por extensión de todo este género musical, sin este color?», se preguntó Ynes Suelves (Madrid, 1991) mientras creaba el proyecto final de la carrera de Diseño de Moda en el Istituto Marangoni de Londres. Rodeada de referencias a bandas como Sex Pistols y The Clash, comenzó a reflexionar sobre «el poderoso impacto de los colores en las culturas suburbanas». Y así se propuso el reto de «aplicar el rosa cuando lo natural fuera utilizar el negro, pero manteniendo la estética del movimiento original», explica. El resultado es una colección más punk por su actitud que por sus estilismos, que le valió el primer premio de su promoción.


"I’ve made two websites with them, and if I need a third one I will ask them again. They are a great team, and inmediatelly they become your own team. Hardworkers and efficients. They are up dated, full of new ideas."